Carta abierta

Nuestro objetivo es crear material cristiano para hermanos y hermanas en la fe, que viven en lugares donde son perseguidos por ser cristianos. Este material estaría disponible a través de sitios web y en sus propios idiomas. 

4 Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, 5 para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.
 (Gálatas 4: 4,5)

Según Las Sagradas Escrituras, todos nacemos una sola vez. Y en esta vida terrenal es que tenemos la oportunidad de vivir en Cristo, o vivir alejados de Cristo. En Cristo tenemos vida eterna, pero sin Cristo, que es la vida, hablamos de muerte eterna. Pero todo se decide en esta vida terrenal, que solo vivimos una vez.

Para nosotros es muy claro, sin embargo, para los millones de personas hindúes no. “El hinduismo o sanatana dharma, se vive día a día con amor y devoción por más de 950 millones de fieles (el ochenta y cinco por ciento vive en la India y el resto repartido por todo el mundo).” (Universidad Autónoma de Madrid). Según un artículo de la BBC.com, ellos creen en la reencarnación, y que lo bueno o lo malo que se haya hecho, se pasará a la siguiente forma de vida, que pudiera ser no humana, cuyo ciclo es infinito.

Pero la reencarnación no es una forma de consuelo para ellos. “Tanto las buenas como las malas acciones nos encadenan y para liberarnos tenemos que superar tanto el karma bueno como el karma malo mediante el karma yoga” (BBC.com). Sin embargo, nosotros como cristianos creemos que no hay nada que el ser humano pueda hacer por sí mismo para liberarse y que sea suficiente, sino que el único camino a la libertad es a través de Cristo. Según Gálatas 4: 4,5, Dios envió a su Hijo, para redimirnos y recibir la adopción de hijos. 

Oremos por nuestros hermanos y hermanas que provienen de la religión hindú. Oremos para que no haya mezcla de creencias (sincretismo religioso), sino que el evangelio (con sus doctrinas) sea claramente enseñado, predicado, y creído por ellos. Oremos para que más personas hindúes conozcan a Cristo, el camino, la verdad y la vida, a través de las vidas transformadas de nuestros hermanos y hermanas, y de otros recursos como éste. Oremos para que mantengamos todos juntos, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza. 

Bendiciones en Cristo,

Mk. 

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